martes, 3 de enero de 2017

El Milagroso Niño Jesús del Monasterio del Espíritu Santo

Durante la jornada de ayer estuvo expuesta a la veneración de los fieles la imagen del Niño Jesús Milagroso en el Monasterio del Espíritu Santo. Esta imagen, se venera desde hace siglos en el Monasterio y no se sabe quién fue el que la trajo. Cuenta la tradición que un desconocido llegó al torno monacal y pidió por favor a la monja tornera, que le guardarse el paquete o cajón que traía, hasta que vinieran a recogerlo. No eran tiempos de sospecha y la Hermana lo recibió sin más. Pasaron meses y hasta un año, y nadie reclamaba el paquete confiado. Las monjas expusieron el caso a los Superiores mayores y estos decidieron abrirlo. La sorpresa fue enorme al descubrir que se trataba de una bella imagen de un Niño Jesús. Con gran alegría lo recibieron en la Comunidad y como no sabían cuál era su nombre lo denominaron "El Niño Esposo". Por aquellos tiempos, aún existía la rama masculina de la Orden y las monjas lo vistieron como a uno de los frailes de la misma. En las crónicas del Monasterio del último tercio del siglo XVII se le conoce con este nombre y se relatan las revelaciones que hizo a la Madre Juana de la Cruz Lozano y Soriana, monja del Monasterio y mística por excelencia, que vivió en estos años. Esta imagen, empezó a ser conocida por los fieles y a realizar innumerables favores y milagros entre ellos. No es pues de extrañar que su primitivo nombre quedara obscurecido para dar paso al de "Niño Jesús Milagroso". La imagen lleva en su mano izquierda una Cruz y en la derecha un pequeño silbato en forma de pez y una campanita. En una de sus revelaciones a la Madre Juana pidió que le pusieran ésta última, como símbolo de las llamadas que interiormente hacía a las almas. El joyero que la realizó grabó en ella lo mismo que el Niño había pedido: una rosa y una Cruz. Algunas personas, dicen haber oído el toque de la campanita al verificarse un gran favor o milagro. La devoción al Divino Niño Jesús Milagroso, se extiende cada día más y más y traspasa las fronteras de nuestra Patria. Son muchos los que acuden a él y reconocen haber obtenido grandes favores. No se ha podido averiguar, qué escultor la hizo, ni a qué escuela pudiera pertenecer. Sí tenemos, un dato interesante. En un libro sobre obras de arte, realizado en Sevilla, se omitió su imagen al no poder dar referencia sobre la misma. Su festividad se celebra el 3 de Enero, día del Dulce Nombre de Jesús. Tanto en este día, como en el de Pentecostés y los primeros domingos de cada mes, la Divina Imagen se expone en la Iglesia del Monasterio.

Fotos: Francisco Javier Bautista.
Redacción: Francisco Javier Bautista.























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